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La subsecretaria de Cultura, Mercedes del Palacio, ha presentado hoy en San Fernando de Henares (Madrid) la convocatoria del concurso para la redacción del proyecto arquitectónico de recuperación, rehabilitación y reforma de la futura sede del Centro de Colecciones de Museos Estatales y la subsede del Archivo Histórico Nacional (AHN).
Archivo Histórico Nacional
El edificio, unas antiguas naves industriales de Galerías Preciados de 120.000 metros cuadrados por las que Cultura pagó 28 millones en diciembre de 2008, permitirá liberar el actual Archivo Histórico Nacional, saturado desde hace años, multiplicando por diez su superficie actual, hasta alcanzar los 400 kilómetros.
El AHN, creado en 1866, es un archivo final. A él van a parar los documentos generados por las sucesivas administraciones. El Archivo General de la Administración (AGA), ubicado en Alcalá de Henares, es el depósito intermedio, que recibe los papeles procedentes de los archivos de cada ministerio. En el AGA permanecen alrededor de 25 años, aunque el atasco que sufre el Histórico Nacional –ubicado en la calle Serrano de Madrid– ha impedido el traspaso de legajos de uno a otro. La ampliación permitirá reordenar sus fondos, incrementará los depósitos de documentos que están pendientes de ingresar en el AHN y mejorará su accesibilidad, tratamiento y conservación.
Por su parte Villanueva de la Cañada también va a contar con un importante archivo estatal:
El Ministerio de Defensa y el Ayuntamiento de Villanueva de la Cañada han firmado un convenio para construir en el municipio el nuevo Archivo General de la Armada.
El inmueble tendrá 12.000 metros cuadrados, divididos en 3 cuerpos. El primero, en planta baja, estará dedicado al acceso público. Allí se expondrán objetos pertenecientes al patrimonio histórico de la Armada. El segundo, en planta baja y primera, tendrá zonas privadas y restringidas. El último poseerá tres alturas y albergará los depósitos de los archivos documentales.
El edificio tendrá capacidad para archivar 65 kilómetros de documentos, cumpliendo las estrictas normas técnicas que establece el Ministerio de Cultura para este tipo de instalaciones. Es decir, además de aglutinar los documentos que la Armada tenía repartidos hasta ahora en siete archivos oficiales y otros edificios auxiliares, se cuidarán las condiciones de conservación, regulando la humedad y temperatura a las que estarán expuestos los registros. Los fondos de este cuerpo militar ascienden a 45 kilómetros lineales de fondos documentales, imprescindibles para el estudio de la historia de España en los últimos tres siglos.
Plataforma para la creación del Colegio Oficial de Archiveros, Bibliotecarios y Documentalistas de Madrid 
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